La scelta di Quiroga di vivere nella selva, quindi, comporta una doppia svolta, non solo di vita ma anche estetica. Come scrive L. Canfield: «La experiencia existencial y la experiencia literaria de la selva en Quiroga son indivisibles, así como son indivisibles su vida y su obra. Su periplo existencial, su progresivo alejamiento de las ciudades …
